
Como ya sabemos, la región cervical se compone de siete vértebras, las cuales tienen un tamaño inferior al del resto de vértebras de las demás regiones.
Entre cada una de las vértebras y la vértebra vecina, se interpone un disco intervertebral. Esto es así excepto en los segmentos C0-C1, C1-C2 y C2-C3.
Las hernias son patologías degenerativas que tienen lugar en los discos intervertebrales.
Las hernias de la columna cervical representan la segunda frecuencia de localización de las hernias de la columna después de las hernias lumbares.
El disco intervertebral
Propiedades biomecánicas del disco
Entre los dos cuerpos vertebrales adyacentes existe una articulación de tipo anfiartrosis que une las dos caras vertebrales mediante el disco intervertebral.
Este disco es un sistema amortiguador, pretensado y cerrado, constituido por una parte central denominada núcleo pulposo, y una periférica llamada anillo fibroso. No hay una separación clara entre el núcleo pulposo y el anillo fibroso, sino que la parte más periférica del núcleo y la parte más profunda del anillo se confunden.
La función fundamental del disco es mantener unidas las dos vértebras y permitir movimientos de balanceo entre ellas, además de amortiguar las cargas y repartir las presiones.
Entre un 70-90% del contenido del núcleo pulposo es agua; el 65% aproximadamente de su peso seco son proteoglicanos y entre el 15 y 20% es colágeno de tipo I.
El contenido de colágeno en el núcleo es mayor en los discos intervertebrales cervicales.
El disco a partir de unos 4 años de vida es una estructura carente de irrigación e inervación.
Desde un punto de vista biológico, el anillo fibroso es bastante parecido al núcleo pulposo en cuanto a su composición sobre todo.
Tanto por arriba como por abajo del disco hay dos capas (una superior y otra por la parte inferior del disco) que se conocen como placa Terminal vertebral que son de cartílago fundamentalmente, estas capas son la unión del disco intervertebral al los cuerpos vertebrales, pero forman parte del disco y no de los cuerpos.
El disco presenta una deformación viscoelástica debido a la entrada y salida de líquidos por la diferencia entre la presión mecánica y osmótica. Este comportamiento viscoelástico contribuye a las modificaciones de su altura durante las primeras horas del día.
La degeneración discal:
La degeneración inicial en la columna vertebral se produce en el núcleo pulposo. Esta degeneración comienza al principio de la vida adulta y va progresando lentamente; se caracteriza por una perdida gradual de condroitin-sulfato y del contenido de agua. Con la consiguiente pérdida de elasticidad, así como la disminución de la altura actual, o grosor del espacio discal.
A medida que el núcleo pierde liquido (se hace más denso), la sustancia fundamental gelatinosa pierde su homogeneidad y se vuelve algo grumosa. Si estos cambios se dan en una persona joven es cuando se considera anormal.
Al aumentar la edad, el anillo fibroso pierde gradualmente parte de su elasticidad sobre todo en la región posterior, donde es relativamente delgado. De esta manera, sus fibras posteriores se separan con más facilidad, o incluso se rompen, y esta región se convierte en una zona débil del anillo por donde el núcleo pulposo puede protruir o herniarse. Una segunda zona de debilidad es la delgada placa Terminal cartilaginosa a través de la cual el núcleo puede protruir hacia el interior del hueso esponjoso subyacente del cuerpo vertebral y formar un nódulo de Schmorl. Estos tienen poco significado clínico. En cambio, la protrusión del núcleo pulposo y del anillo dentro del canal vertebral tiene una gran repercusión clínica.
3.- Hernia discal cervical
3.1.- Etiología de la hernia discal cervical
- Algunos factores relacionados con el estilo de vida, como el tabaquismo, la falta de ejercicio regular y una alimentación inadecuada, contribuyen sustancialmente a una mala salud del disco.
- A medida que el cuerpo envejece, los cambios bioquímicos naturales hacen que los discos gradualmente se sequen, afectando a la resistencia y a la elasticidad.
- Una mala postura, combinada con el uso habitual de una mecánica corporal incorrecta, puede ejercer una tensión adicional sobre la columna cervical.
- Por degeneración o envejecimiento articular, con formación de osteofitos vertebrales.
- Por micro traumatismos
- Si se combinan estos factores con los efectos del desgaste cotidiano, las lesiones, una manera incorrecta de levantar objetos o los movimientos de torsión, es fácil entender lo que ocasiona una hernia de disco. Una hernia de disco puede desarrollarse súbita o gradualmente, en cuestión de semanas o meses.
¿Qué sucede en la hernia de disco cervical?
La herniación (prolapso, protrusión, extrusión, rotura) del disco intervertebral no equivale a su degeneración; en realidad, es un acontecimiento específico que se produce como complicación de la degeneración discal. En lenguaje coloquial se conoce como deslizamiento discal. La Hernia discal es más frecuente en individuos relativamente jóvenes particularmente en hombres y son más frecuentes en la región lumbar, aunque también se dan en menor medida en la región cervical.
El núcleo pulposo carece de nervios y es, por tanto, insensible; pero cuando comienza a herniarse en dirección posterior distiende el anillo fibroso, que si está dotado de sensibilidad, y causa dolor. En consecuencia, las fibras distendidas y degeneradas del anillo se separan y parte del núcleo se hernia. Puesto que el ligamento longitudinal posterior cubre el anillo en la línea media, la hernia tiende a ser posterolateral. Una hernia posterolateral puede comprimir o distender la raíz nerviosa que sale por el agujero intervertebral distal al disco; de esta manera, una hernia del disco C5-C6 afecta la 6º raíz nerviosa cervical. La manifestación clínica de esta irritación de la raíz nerviosa provoca debilidad de los músculos deltoides y bíceps, disminución del reflejo bicipital y disminución de la sensibilidad cutánea en los dedos pulgar e índice.
El fragmento herniado del núcleo pulposo se deshidrata y se endurece. Aunque es avascular puede llegar a vascularizarse, y en este caso puede desencadenar una reacción de naturaleza autoinmune. En ocasiones, varias semanas después del episodio, la porción herniada del núcleo experimenta una fibrosis, se encoge, y disminuye así la presión sobre la raíz nerviosa.
Ocasionalmente, sin embargo, la porción herniada queda separada o secuestrada, e incluso puede migrar en dirección proximal y distal.
Cuando la médula espinal está comprimida por una hernia central del disco, el cuadro clínico no se distingue del que presenta una neoplasia de la médula espinal y requiere una investigación urgente. Siempre debe consultarse de inmediato con un neurocirujano.
Los segmentos de la columna cervical que con más frecuencia resultan afectados por las hernias discales son C5-C6 y C6-C7, los cuales, son particularmente móviles y están situados en la zona de máxima lordosis. En la columna cervical hay poco espacio en los agujeros intervertebrales para la salida de las raíces nerviosas. De ahí que sea fácil que una hernia posterolateral pueda comprimir la raíz.
Las hernias de disco en la región cervical son menos frecuentes que en la región lumbar debido fundamentalmente a que en la región cervical el ligamento común posterior es más grueso y tapiza prácticamente todo el canal medular; además la existencia en la región cervical de las apófisis unciformes que forman las articulaciones uncovertebrales las cuales no están presentes en la columna lumbar, constituyen un mecanismo de protección en las vértebras cervicales las cuales impiden que el núcleo pulposo se desplace contra la raíz.
Síntomas de la hernia discal cervical
Los principales síntomas que nos podemos encontrar en un paciente que padezca una hernia cervical pueden ser:
- Dolor cervical, especialmente en la parte posterior o lateral
- Dolor profundo cerca o sobre omóplatos del lado afectado
- Dolor que se irradia al hombro, parte superior del brazo, antebrazo y en ocasiones a la mano, los dedos o el tórax
- Empeoramiento del dolor al toser, hacer esfuerzos o reír
- Incremento del dolor al doblar el cuello o girar la cabeza hacia un lado
- Espasmo de los músculos cervicales
- Debilidad de los músculos del brazo
Diagnóstico de la hernia discal cervical
- Los síntomas y la exploración de la sensibilidad, movilidad y reflejos motores nos ofrecerán un mapa perfecto de la posible raíz afectada.
- Confirmar el proceso mediante una RMN (Resonancia Magnética Nuclear) ó un TAC (Tomografía Axial Computerizada).
- En ocasiones se plantea realizar un estudio de la conducción nerviosa mediante una exploración Electromiográfica.
Consecuencias de una hernia discal cervical
Compresión de raíces de nervios periféricos.
La compresión de la raíz de un nervio raquídeo produce dolor en el área de la distribución de la raíz, pero es importante recordar que el dolor puede diseminarse mas ampliamente de lo imaginado, sintiéndose el dolor de la raíz de C4 en la región escapular y el dolor de la raíz C7 en la parte anterior del tórax.
Típicamente, espasmos agudos de dolor se suman a un dolor sordo de base. El dolor puede producir espasmos musculares con una reducción del movimiento en la columna o una perdida total de movimiento asociada con un tortícolis. El compromiso de la raíz motora da como resultado debilidad muscular y disminución o ausencia de reflejos en los brazos. A continuación se listan los músculos inervados por las raíces mas comúnmente involucradas:
El compromiso de la raíz sensitiva puede producir parestesia y por consiguiente alteraciones de todas la modalidades de sensibilidad en el dermatoma afectado. En los estados tempranos, la irritación de la raíz motora puede producir una sensibilidad aumentada y no placentera (Hiperestesia).
Compresión de la medula espinal cervical
La compresión de la medula espinal cervical es una condición muy seria que ocurre más comúnmente a nivel de C5-C6. Aunque hay una variedad de presentaciones, la mas usual involucra hallazgos por lesión de neuronas motoras superior en una o ambas piernas con hallazgos por lesión de neuronas motoras inferior en los miembros superiores. Además puede haber una variedad de anormalidades sensitivas en brazos y piernas.
Compresión de la arteria vertebral
La compresión de la arteria vertebral puede llevar, particularmente en el paciente, a isquemia de tronco cerebral y a la producción de vértigo, alteraciones visuales, dificultad para hablar y deglutir, ataxia y otros signos de disfunción cerebral.