Capacidad del músculo contractibilidad

Definición - Qué es Capacidad del músculo contractibilidad

La contractibilidad es la propiedad que poseen tanto el músculo esquelético como el músculo cardíaco de generar una contracción. El cual posteriormente termina produciendo una fuerza, con el fin de vencer una resistencia mayor y generar un tipo de contracción.

Vídeo sobre Contractibilidad

Apoyo gráfico

contractibilidad

El músculo es una estructura que para que sus diferentes fibras y tejidos puedan activarse correctamente, necesitan de cinco capacidades. Las cuales solo se llevan a cabo, cuando el músculo y la neurona motora se encuentran sanos y sin ninguna alteración.

"Es una capacidad que tiene el músculo esquelético y el cardíaco de producir un cambio en cada fibra muscular"

Así mismo, el músculo puede generar contractibilidad de diferentes formas, de las cuales una corresponde a una tensión mantenida de las fibras, mientras que en las otras si se genera un cambio en la longitud del músculo, ya se acortando o alargando las fibras musculares.

¿Cuáles son las otras capacidades del músculo?

El sistema muscular además de realizar el proceso de la contracción, también es capaz de realizar las siguientes actividades:

  1. Mediante la transformación de sus fibras, se adapta a diferentes situaciones. Esto es lo que llamamos plasticidad
  2. Logra extenderse cuando cada fibra esta sin activarse. 
  3. Es capaz de estirarse y de volver a su posición fisiológica.

Finalmente, gracias a la placa motora, puede recibir las señales eléctricas necesarias para la contracción muscular. La cual solo pueda darse gracias al potencial de acción que se activa con la liberación de la acetilcolina.

"Todas las capacidades juntas hacen que los músculos puedan ejercer una fuerza que logre generar un movimiento"

¿Qué pasa cuando el músculo no es capaz de contraerse?

De forma simple, al estudiar la fisiología muscular, encontramos que esta se produce gracias a un potencial de acción, que transmite un estímulo al interior de los músculos. Esa señal eléctrica, permite que las proteínas actina y miosina se desplacen con lo cual se termina de generar la contracción de los músculos.

Entonces, cuando alguna parte de estos procesos se descontrola o bloquea, encontramos que el músculo pierde su capacidad contráctil, lo cual genera que no se generen movimientos, ni ningún tipo de contracción.

Posteriormente, la persona comienza a sentir pérdida progresiva o repentina de la fuerza en piernas y brazos, lo que también puede producir debilidad de los músculos encargados de la respiración y la producción del latido cardíaco, llegando incluso a comprometer la vida de la persona. Esto sucede en las enfermedades que afectan a multitud de músculos. 

¿En qué enfermedades se pierde la contractibilidad?

Las enfermedades en las que usualmente, el sistema muscular termina afectado son aquellas en las que el nervio motor no es capaz de llevar la señal al interior de los músculos, y esto puede ser causado incluso desde la salida del nervio en la médula espinal, o por alteraciones en las proteínas musculares.

Esas patologías mencionadas son las siguientes:

  • Miastenia Gravis.
  • Distrofia muscular de Duchenne
  • Esclerosis lateral amiotrófica
  • Miocardiopatía, en este caso se afecta es la capacidad del corazón de producir el latido cardíaco.