La salud es lo primero y por eso mismo hay que acudir al médico ante cualquier eventualidad, hoy trataremos un problema por el que cada vez se está extendiendo una mayor preocupación, nos referimos a la celulitis. Esta acumulación de grasa que se produce tanto en la zona de los glúteos como de los muslos y hasta en la parte baja del estómago es lo que se denomina como celulitis y origina que se formen abultamientos en dichas zonas.
Además de esto, que son aspectos meramente físicos, detrás de eso podemos observar como la celulitis modifica los tejidos grasos, aportándoles un mayor espesor que se traduce en la aparición de dolor local.
La fisioterapia como aliada para la disminución en la celulitis
Si acudimos a un fisioterapeuta además de ofrecernos una serie de consejos que detallaremos a continuación, nos podrá ayudar principalmente mediante los masajes que podrá darnos, los cuales son bastantes efectivos a la hora de combatir la celulitis, principalmente los masajes con agua fría que originan una pérdida de grasa en la zona afectada.
Otra de las formas mediante las cuales nos podrá ayudar un fisioterapeuta será a través del drenaje linfático manual, cuyo objetivo es la eliminación de líquidos y por tanto una mejor regeneración de la piel, por lo que es aconsejable que el profesional que nos lleve a cabo las sesiones nos haga un estudio previo de nuestro caso, ya que cada persona es distinta y se debe abordar el tratamiento de una forma diferente.
Una vez que hayamos salido de nuestro fisioterapeuta, para seguir mejorando en nuestro tratamiento, es aconsejable seguir una serie de consejos que tal y como habíamos comentado antes, nos los proporcionará nuestro fisio.
¿Qué hacer cuando no estemos en el fisioterapeuta?
En primer lugar es muy importante el beber mucha agua, esto es debido a que si bebemos mucha agua estaremos mejorando nuestra circulación y por tanto eliminando la acumulación de líquidos y grasas en los tejidos afectados.
Por otra parte, y este es uno de los consejos que más cuesta las personas seguir, es el de hacer ejercicio, en caso de que no nos guste la práctica deportiva podemos dar largos paseos para realizar la misma función. Se suele aconsejar esto ya que la pérdida de peso a través de deportes como correr, nadar o incluso el tenis hace que nuestros músculos se refuercen a la vez que perdemos grasa.
El ejercicio debemos acompañarlo con una dieta saludable en la que tendremos que eliminar la sal y otros alimentos perjudiciales, sobre todo los fritos, por lo que además de acudir al fisioterapeuta para las sesiones de masajes, es recomendable acudir a un dietista para que nos haga un seguimiento en nuestras comidas.
Por último, aunque pueda parecer algo insignificante, tenemos que evitar la ropa ajustada ya que este tipo de ropa va a perjudicar nuestro riego sanguíneo aumentando nuestro problema con la celulitis.
En definitiva, son muchos los consejos que podemos seguir, pero debemos de tomárnoslo en serio sobre todo porque a lo largo del tiempo puede ser un problema que puede ir a peor y es mejor atajarlo en el momento en que tiene solución y podemos poner de nuestra parte para evitar cualquier riesgo en nuestra salud.
Con esta serie de consejos más nuestras sesiones con el fisioterapeuta nos irán reduciendo la celulitis progresivamente tanto en perimetro como en % de grasa, por tanto podremos combatirla llevando una vida activa y fuera de los abusos que dañan nuestra salud como por ejemplo el tabaco, el alcohol, el estrés o incluso una vida sedentaria.