Lesiones de lumbares y sus cuidados

Hernia discal lumbar

Definitivamente, esta es de las lesiones más comunes de la columna lumbar y, por ende, es muy importante conocer qué ocurre en el disco articular, cómo podemos evitarlo y cuál es su tratamiento
Hernia discal lumbar

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Aunque generalmente esta afección se ve asociada con el origen de lumbago o dolor lumbar, una persona diagnosticada con una hernia discal lumbar no siempre presenta síntomas como la lumbalgia. Entonces ¿cómo se reconoce una hernia discal lumbar? En el siguiente articulo te responderemos esta y otras interrogantes sobre esta discopatía, cómo: causas, medidas preventivas y los métodos de terapia conservadora y quirúrgica disponibles para curarla:

¿Qué es la Hernia discal lumbar?

Antes de hablar más a fondo sobre esta lesión del disco intervertebral, te explicaremos un poco acerca de las estructuras anatómicas involucradas: la columna lumbar y los discos intervertebrales lumbares.

Anatomía de la columna lumbar

Si bien la columna vertebral cuenta con 33 vértebras, la región lumbar dispone de un total de 5 vértebras (L1, L2, L3, L4, L5). Entre cada dos vértebras, hay unas estructuras llamadas discos intervertebrales, las cuales se encuentran próximas a la médula espinal y las raíces nerviosas espinales. El disco intervertebral está constituido por una cubierta de tejido conectivo altamente resistente (anillo fibroso) y un núcleo gelatinoso (núcleo pulposo). Estos discos son los que se encargan de recibir y distribuir el peso que recibe el cuerpo, especialmente la región lumbar. No podría haber movimiento y muchos sistemas no funcionarían sin ellos, ya que además los mismos dan elasticidad a la columna vertebral, contribuyen a la manutención de la postura, soportan cada movimiento y amortiguan las cargas axiales durante el movimiento. Al cumplir todas estas funciones de manera continua, no es de extrañar que eventualmente se degeneren y debiliten con los años. Dando como resultado la lesión que es el tema principal en este artículo.

anatomía de la columna lumbar
En el caso de una hernia discal lumbar el tejido conectivo que rodea al núcleo pulposo, o sea el anillo fibroso se rompe, por lo que el material gelatinoso del núcleo fluye hacia afuera y presiona los nervios circundantes (nervios espinales y médula espinal). Las funciones de la columna en su conjunto dependen de la función de cada disco intervertebral, por lo que esta lesión además de provocar dolor de espalda, puede alterar severamente diversas funciones y ocasionar alteraciones motoras y sensitivas.
Esta afección fue indirectamente reconocida por las primeras civilizaciones (griegos y egipcios) quienes indicaron que existía una relación entre la patología de la columna y las molestias en espalda y extremidades inferiores. Debido a que antes de 1930 se creía que la hernia del núcleo pulposo era un tumor o condroma, se cree que las primeras cirugías que se llevaron a cabo a principios del siglo XX para solucionar “condromas” en la columna vertebral en realidad se trataban de hernias discales.
Con la creación de los estudios de imagen, la detección de esta afección fue simplificada. Siendo uno de esos estudios la tomografía axial computarizada, la cual estuvo disponible en la década de los 80 por el trabajo de Hounsfield y Ambrose, la creación de este estudio permitió que la hernia de disco lumbar se pudiese clasificar preoperatoriamente por la dirección (anterior, central, posterolateral y lateral) y el grado del desplazamiento (protrusión, herniación, extrusión). Posteriormente otro importante estudio de imagen creado para valorar esta discopatía, fue la resonancia magnética, introducida para su uso clínico en la década de los 90, este estudio además de ser útil para valorar esta discopatía, demostró que algunas hernias de disco disminuyen de tamaño, lo que, junto con otros datos de historia clínica, impulsaron la idea de reconsiderar la cirugía en casos de pacientes sintomáticos.
Gracias al avance de la ciencia y la tecnología desde el año de 1930 hasta el presente 2020, la comprensión de la fisiopatología, el diagnóstico y el tratamiento de esta afección ha seguido siendo cada vez más simplificado. Sin embargo, a pesar de la cantidad de estudios disponibles, sigue habiendo controversia sobre los mejores enfoques terapéuticos para pacientes con esta afección, en este artículo te nombraremos los más destacables.

¿Cómo se ve una Hernia de disco lumbar?

En la siguiente infografía podrás observar como se ve una vértebra lumbar sana y como se ve desplazado el núcleo pulposo, cuando la red de bandas tendinosas del anillo fibroso se rompe dando origen a la hernia de disco lumbar:

hernia discal lumbar

Incidencia y prevalencia de la Hernia discal lumbar

Se estima que la incidencia de esta discopatía es de aproximadamente 5 a 20 casos por cada 1000 adultos al año y que la misma es más común en personas que se encuentren en la tercera o quinta década de vida (30-50 años). Siendo afectados en el 95% de estos casos, los discos L4-L5 y L5-S1, hernias por encima de estos niveles es común en personas mayores de 55 años. La prevalencia de esta lesión en Estados Unidos es de aproximadamente 1-3%, afectando más a hombres que a mujeres con un índice de relación de 2:1. Es importante destacar que el síndrome clínico de radiculopatía asociado a la hernia de disco es una causa importante de morbilidad y costo en los Estados Unidos.

Síntomas y signos de la Hernia discal lumbar. ¿Cómo saber si la padezco?

Cómo ya hemos destacado los discos intervertebrales están muy cerca de importantes estructuras de la columna vertebral: nervios espinales y médula espinal, los cuales inervan a la región inferior del cuerpo y lo conectan con el sistema nervioso central. Por lo que, si alguno de los discos intervertebrales lumbares se abulta o hernia, el material desplazado puede hacer contacto con los nervios circundantes y comprimirlos. Esto puede causar síntomas como dolor lumbar y dolor en áreas del cuerpo que a menudo están lejos de la ubicación de la herniación. Así como también trastornos sensitivos y motores, los cuáles pueden variar según el segmento afectado en la columna lumbar.

Patrones de los síntomas de la hernia discal lumbar

Los síntomas dependen de entre otras cosas, de la ubicación del disco herniado y si está presionando los nervios o no. Si no se comprime los nervios, esta afección puede continuar sin ocasionar dolor y fallas neurológicas. Por lo tanto, se considera un caso asintomático que no tiene que ser tratado. Teniendo en cuenta que los casos sintomáticos pueden desarrollar variedad de alteraciones dependiendo de la raíz lumbar comprimida, los patrones sintomáticos de cada segmento herniado son:

  • Hernia T12 – L1 (la raíz L1 es la afectada): una lesión de disco a este nivel puede causar dolor y pérdida sensitiva en la región inguinal y medial del muslo, no compromete la función motora. Es una de las hernias de menor aparición.
  • Hernia L1 – L2 (la raíz L2 es la afectada): ocasiona dolor, entumecimiento u hormigueo en la cara anterior y medial de la región superior del muslo y ligera debilidad en los cuádriceps. Además, el reflejo suprapatelar está ligeramente disminuido.
  • Hernia L2 – L3 (la raíz L3 es la afectada): puede causar notable debilidad en el cuádriceps, que dificulte la capacidad de enderezar la pierna, así como dolor, entumecimiento u hormigueo en el área anterolateral muslo. Además, el reflejo rotuliano o suprapatelar se encuentra disminuido.
  • Hernia L3 – L4 (la raíz L4 es la afectada): puede causar debilidad en el cuádriceps (debilidad en la extensión de rodilla) y dolor, entumecimiento u hormigueo en las nalgas que se irradia hacia la región inferior de la parte frontal del muslo. Además, el reflejo rotuliano o suprapatelar se encuentra disminuido.
  • Hernia L4 – L5 (la raíz L5 es la afectada): puede ocasionar dolor, entumecimiento u hormigueo que comienza en la nalga y se irradia hasta la región superior de la parte posterior del muslo y luego hacia la parte delantera de la pantorrilla (espinilla); debilidad en los movimientos de abducción de la cadera, flexión de la rodilla, dorsiflexión del pie, extensión y flexión del dedo gordo del pie, inversión y eversión del pie. Además, el reflejo semitendinoso / semimembranoso se encuentra disminuido.
  • Hernia L5 – S1 (la raíz S1 es la afectada): puede causar debilidad de la flexión plantar, lo que consecuentemente ocasiona dificultad o incapacidad para pararse sobre los dedos de los pies (ponerse de puntillas) y dolor, entumecimiento u hormigueo que puede irradiarse desde la nalga hacia la parte posterior de la pierna hasta llegar al borde externo del pie (5° dedo del pie). Además, el reflejo Aquileo o de Aquiles está disminuido o ausente y se puede presentar Síndrome de cauda equina o de la cola de caballo, el cual ocasiona debilidad en la musculatura perineal y perianal que conlleve a la aparición de incontinencia urinaria y fecal o disfunción sexual.

Es importante destacar que los patrones de molestias detallados anteriormente no se presentan siempre de la misma manera en cada caso, ya que algunas personas tienen una composición anatómica distinta a los demás, lo que consecuentemente ocasiona síntomas diferentes a los anteriormente expuestos.

¿Cuáles son las causas de la Hernia discal lumbar?

Investigaciones científicas actuales exponen que el origen de esta discopatía radica en la combinación de varios factores. En primer lugar, se cree que para que se origine esta lesión, tienen que existir años de desgaste en el disco intervertebral relacionado con la edad, con una deficiencia o por la sobrecarga permanente de la columna vertebral.

Dado que los discos intervertebrales no reciben un aporte sanguíneo como otras estructuras, su nutrición es obtenida a través de un proceso llamado difusión, el cual consiste en un intercambio pasivo de líquidos y nutrientes (glucosa, lactato y oxígeno) provocado por el movimiento y la compresión. Por lo tanto, el ejercicio físico es directamente responsable de la nutrición del disco intervertebral. Si la persona se mueve muy poco, la difusión del líquido nutriente de los discos intervertebrales no se realiza óptimamente, lo que conduce a la disecación, desnutrición y a largo plazo degeneración y al debilitamiento del anillo fibroso que recubre al núcleo pulposo, aumentando el riesgo de que el núcleo se deslice, salga del anillo fibroso y presione la raíz nerviosa o médula. Este riesgo se ve exacerbado por factores adicionales.

Factores desencadenantes

  • Obesidad.
  • Mala postura.
  • Levantamiento incorrecto de objetos pesados.
  • Movimientos espasmódicos.
  • Deportes en los que se comprime o estresa constantemente la columna (por ejemplo, montar a caballo, andar en bicicleta de montaña) o deportes que ocasionen torsión de la parte baja de la columna (tenis, squash, golf).
  • Sedentarismo.
  • Lesiones o traumatismos lumbares.
  • Deformidades congénitas.
  • Embarazo.

Fases de la degeneración del disco intervertebral que ocasiona el disco herniado

La degeneración del disco intervertebral se presenta en varias etapas. Un disco intervertebral sano e intacto, cuenta con un núcleo pulposo rodeado por un resistente anillo fibroso. Si este resistente recubrimiento cede bajo la presión del núcleo gelatinoso por los factores anteriormente mencionados, se da inicio a las siguientes fases:
fases de degeneracion de la hernia discal

  1. Degeneración del disco: en esta fase el anillo fibroso ha perdido su función amortiguadora, pero el núcleo se mantiene en su posición.
  2. Prolapso (hernia incompleta): en esta fase ya se puede hacer evidente la aparición de una protuberancia, que podría reducir en algunos casos el espacio en donde se encuentran los nervios adyacentes.
  3. Extrusión (hernia completa): el núcleo gelatinoso pasa a través de alguna rasgadura del anillo fibroso.
  4. Secuestro o disco secuestrado (hernia completa): es la fase degenerativa final y consiste en la movilización del núcleo pulposo fuera del disco intervertebral.

Prevención de la Hernia discal lumbar

Si bien, el proceso de envejecimiento del disco intervertebral que conlleva a la herniación no puede ser detenido, se pueden tomar acciones enfocadas en la ralentización del mismo. A continuación, te dejamos algunas recomendaciones enfocadas en la prevención de esta discopatía:

  • Prestar atención al peso corporal: el sobrepeso ejerce presión sobre tu espalda y promueve la degeneración del disco.
  • Hacer ejercicio con regularidad: principalmente aquellos que permitan fortalecer los músculos de la espalda.
  • Tomar medidas ergonómicas en el lugar de trabajo: si es posible, siéntese derecho y en una silla alta normal. Cambie su posición con frecuencia e involucre pausas activas.
  • Evite sentarse en asientos profundos y suaves; se recomienda un cojín en forma de cuña sobre la región lumbar.
  • Asegúrese de que la columna se mantenga resta al momento de dormir: para ello use colchones firmes y almohadas de poca altura.
  • Deja de fumar: evite el consumo de cualquier producto de tabaco.
  • Levantar peso adecuadamente: recuerde mantener la espalda recta y doblar las rodillas al momento de levantar objetos de peso.

Peligros para la espalda al agacharte mal - Cómo coger pesos bien

Para que realices adecuadamente la última recomendación, te dejamos el siguiente vídeo en donde un fisioterapeuta experto te explicará de manera detallada como mantener una espalda sana y evitar lesiones discales al levantar determinadas cargas:

Diagnóstico diferencial

Desde el punto de vista sintomatológico y clínico, existen muchas enfermedades que lesiones con similitudes esta discopatía lumbar. Las más destacables son las siguientes:

¿Cómo se diagnostican la Hernia discal lumbar?

Generalmente, un exhaustivo examen físico y neurológico combinado con la anamnesis, es suficiente para determinar si hay una hernia de disco en la región lumbar. En el examen físico realiza un examen palpatorio, se inspecciona la función motora, sensorial y refleja para determinar el nivel de raíz nerviosa afectada, y se valora la fuerza muscular para detectar anomalías o debilidades. También se realizan pruebas de amplitud articular y de provocación, todos estos procedimientos aportan importante información que permite no sólo la confirmación del diagnóstico, sino que también permiten a un médico o fisioterapeuta experto poder inferir sobre el nivel de la herniación presente.

Pruebas adicionales

  • Prueba de elevación de la pierna recta: en esta prueba el paciente se acuesta, mientras el especialista levanta lentamente y de manera extendida la pierna afectada. Si la persona examinada siente dolor antes de que la pierna esté en ángulo recto, esto puede indicar una hernia de disco. Si se presenta dolor neurológico en la pierna y la espalda baja entre 30-70° de flexión de la cadera, indica un Lasègue positivo que sugiere una hernia de disco en las raíces nerviosas L4-S1
  • Prueba de Trendelenburg: esta prueba requiere que el paciente se pare sobre una pierna; el especialista se para detrás del paciente y estabiliza la cadera, mientras el paciente se posiciona sobre una pierna. La caída de la pelvis en el lado opuesto, sugiere patología de la raíz nerviosa L5.
  • Resonancia magnética (RM): es el estudio que proporciona un diagnóstico preciso de esta enfermedad del disco intervertebral.
  • Tomografía computarizada (TC): es útil para evaluar fracturas vertebrales y estructuras posteriores de la columna vertebral. En comparación con la resonancia magnética, la imagen del canal espinal y la resolución de la médula espinal son débiles. La TC puede ser útil si la RM no está disponible.
  • Electromiografía (EMG): en caso de que se detecten trastornos sensitivos o neurológicos durante el examen físico, una electromiografía puede resultar útil para cuantificar el grado de daño en las fibras nerviosas.

Es importante destacar que incluso si se detecta una herniación de disco en la resonancia magnética o la tomografía computarizada, no tiene que ser la causa de los síntomas que aquejan al paciente. Ya que, en muchos casos, se produce una hernia de disco sin síntomas (casos asintomáticos).

Hernia y protrusión discal lumbar - Signos radiológicos

Si quieres conoces como se puede observar esta discopatía en estudios radiológicos, te recomendamos ver el siguiente vídeo, en donde un experto fisioterapeuta te explicará de manera breve y didáctica cuáles son los signos radiológicos de esta afección:

Tratamiento médico para la Hernia discal lumbar

En los casos sintomáticos el tratamiento médico puede ser conservador o invasivo, siendo el primero el más seleccionado por los médicos debido a los óptimos resultados obtenidos. Con el tratamiento conservador los síntomas de una hernia de disco mejoran e incluso pueden desaparecer con la prescripción de fármacos o medicamentos que varían dependiendo de las molestias o síntomas presentes: analgésicos para el dolor, antiinflamatorios no esteroideos (AINES), medicamentos anticonvulsivos para analgesia del dolor neuropático (gabapentina - neurontin), complementos vitamínicos para facilitar la reparación de tejidos cartilaginosos y conectivos (complejo B, vitamina C, glucosamina y condroitina), relajantes musculares entre otros…

Si el dolor no se puede manejar con la medicación habitual, algunos médicos suelen indicar una infiltración peridural o periradicular para aliviar el dolor.

¿Cómo es la cirugía para la Hernia de disco lumbar?

Una vez agotadas todas las medidas conservadoras, y el dolor se vuelve inmanejable, hay signos claros de parálisis o la persona afectada ya no puede controlar su vejiga, la cirugía es necesaria para evitar daños irreparables de las raíces nerviosas. Son varias las técnicas quirúrgicas disponibles en la actualidad, la selección de alguna de ellas dependerá de las características de cada paciente. Los métodos quirúrgicos más usados son:

  • Ablación con láser del disco intervertebral: es una opción adecuada para casos agudos, la misma consiste en la eliminación del disco afecta mediante el uso de láser, el cual es introducido por una pequeña incisión.
  • Microdisquectomía: a través de una pequeña incisión el disco afectado se extrae, se supone que esto alivia los nervios que están comprimidos por el disco herniado y por ende se detienen las molestias.
  • Disquectomía abierta: es esencialmente la misma operación que la anterior, sin embargo, en esta se realizan incisiones más grandes.
  • Artrodesis vertebral (espondilodesis): se trata de na cirugía abierta en donde se bloquea y se fijan dos vértebras, en este caso las lumbares contiguas al disco herniados, con esto se bloquea el movimiento de manera permanente con material de osteosíntesis. La artrodesis solo se lleva a cabo si no hay otras formas de aliviar los síntomas.
  • Reemplazo total de disco (prótesis): consiste en el remplazo del disco herniado por uno artificial, el cual permite un movimiento de rotación que imita los movimientos naturales de las vértebras lumbares.

¿Cuándo optar por la cirugía u operación quirúrgica?

Si tienes dudas sobre si deberías someterte o no a una intervención quirúrgica, te recomendamos que veas el siguiente vídeo, en donde el experto fisioterapeuta Roberto Junquera te hablará desde su experiencia y sus amplios conocimientos, sobre los factores que te indican que es necesario la intervención quirúrgica:

Tratamiento de Fisioterapia para la Hernia discal lumbar

El tratamiento fisioterapéutico no restaura la función de los discos intervertebrales lesionados si el volumen ya se ha reducido significativamente por la fuga del núcleo pulposo. El objetivo del tratamiento es fomentar el proceso de regresión natural del disco con diferente medidas y herramientas terapéuticas, lo que consecuentemente ocasiona la reducción de los síntomas presentes.

Diferentes estudios demuestran que el movimiento y el ejercicio terapéutico es la medida conservadora más efectiva en caso de esta lesión. Mientras que el reposo y la protección es contraproducente. Las intervenciones fisioterapéuticas que tienen un alto grado de efectividad basada en la evidencia son las siguientes:

  • Educación para el dolor.
  • Estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (TENS).
  • Terapia de tracción.
  • Termoterapia.
  • Manipulación vertebral.
  • Técnicas manuales de acupresión y relajación miofascial.
  • Técnica de ventosas o cupping.
  • Ejercicios de estabilización del CORE.
  • Ejercicios de fortalecimiento.
  • Ejercicios de estiramiento.
  • Técnicas de Neurodinamia.
  • Gestión del estrés y ejercicios de relajación: reduce la tensión de espalda.
  • Gimnasia postural o Reeducación postural global (RPG).

Tratamiento propuesto en Fiit Concept - Fisioterapia Integrativa para la Hernia discal lumbar

Antes de hablar sobre el tratamiento propuesto de esta visión es necesario esclarecer un poco de que trata. Siendo así, la Fisioterapia Integrativa – Fiit Concept está basada en la filosofía de la Medicina Tradicional China (Medicina Oriental, esta medicina establece que cada emoción concreta contribuye al desarrollo de una alteración de algún órgano o víscera en concreto, la presencia de esta alteración podrá repercutir negativamente en el tono muscular y sobre la biomecánica intervertebral, debido a la relación establecida por el sistema simpático y parasimpático. Adicionalmente otros factores causales muy importantes, pero poco tomados en cuenta como la nutrición y el mal manejo del estrés también contribuyen a la instauración de una disfunción visceral que finalmente genere alteraciones en el sistema musculoesquelético.

Fisioterapia Integrativa – Fiit Concept

Toda esta relación la podrás ver ejemplificada en el siguiente diagrama:
Infografía de Fiit Concept - Fisioterapia Integrativa
Ya aclaradas las bases de nuestra visión terapéutica podemos afirmar que la hernia discal lumbar no sólo se produce por factores físicos o mecánicos (malas posturas, trabajos repetitivos, exceso de ejercicio o sedentarismo) mencionados anteriormente en el pasado artículo, sino que además puede verse influida por la presencia de estrés, alteraciones nutricionales y emocionales pueden ser los causantes.
Desde el punto de vista Fiit Concept – Fisioterapia Integrativa la hernia discal lumbar se origina como consecuencia de una disfunción visceral del riñón, la vejiga, los órganos sexuales (útero-ovarios y próstata) y del intestino, sobre todo en aquellas hernias discales lumbares que están presentes durante mucho tiempo o que son muy difíciles de tratar con los tratamientos de fisioterapia convencionales.

Desde el punto de vista Fiit Concept – Fisioterapia Integrativa la hernia discal lumbar se origina como consecuencia de una disfunción visceral del riñón, la vejiga, los órganos sexuales (útero-ovarios y próstata) y del intestino,

Cuando alguno de los órganos y vísceras mencionados anteriormente presenta una alteración en su funcionamiento, puede ocasionar de manera refleja rigidez en la zona dorsal baja, lumbar alta y pelvis, conduciendo a una zona lumbar hipermóvil e inestable que acabará en bloqueos vertebrales y desbalances musculares de la zona lumbar y pélvica, lo cual aumentará la presión sobre el disco intervertebral que consecuentemente termina por provocar el dolor característico de la hernia de disco lumbar.
Ahora bien, por un lado, una disfunción en los riñones puede producir herniaciones hacia el lado izquierdo de ciertos discos intervertebrales lumbares (L4-L5, L5-S1). Mientras una falla en el funcionamiento de la vejiga suele contribuir a la aparición de una hernia lumbar izquierda L3-L4.
Tanto el útero-ovarios como la próstata pueden provocan un aumento notable de la presión discal hacia el lado derecho (L5-S1). Finalmente, el intestino delgado origina una hernia hacia el lado derecho muy específica de la L4-L5, allí también se ve asociado el colon irritable que va a provocar una hernia hacia el lado izquierdo (L1-L2, L5-S1). Una vez aclarado esto, podemos decir que una herniación lumbar derecha es producida por la disfunción del intestino delgado y la disfunción del útero-ovarios o próstata, depende del caso. Mientras que la herniación izquierda está asociada a la disfunción visceral de riñón, vejiga y del colon irritable. Esta disfunción puede originarse por variados factores que a continuación te explicaré:

Causas de las disfunciones viscerales que originan la Hernia discal lumbar

Factores causales de la disfunción en riñón, vejiga y colon irritable que conduce a una Hernia discal lumbar izquierda:

  • Estrés: un estado de alerta patológico que induce un desequilibrio simpático y parasimpático es ocasionado por situaciones de estrés, lo que conlleva al agotamiento de los sistemas afectando directamente a la vejiga, al riñón conduciendo también a un colon irritable acompañado de diarreas y estreñimiento.
  • Nutrición: mantener una dieta acidificante a corto plazo puede repercutir en los órganos digestivos y alterar a su vez el funcionamiento del riñón y vejiga. Adicionalmente existen ciertos alimentos, que en particular afectar al riñón con las carnes rojas y procesadas, así como los alimentos que contenga mucho ácido úrico y altos niveles de sal como los embutidos y los encurtidos. En cuanto al colon irritable, éste puede generar como consecuencia del consumo de alimentos que ocasiones intolerancia o gases como los lácteos.
  • Emociones: la emoción que directamente afecta el funcionamiento renal es el miedo, la inseguridad, la desesperanza y la falta de autoestima. Además, ciertos factores externos alteran el funcionamiento de estos órganos como: la época de año fría y húmeda (invierno). En caso de un colon irritable este puede verse originado en individuos con baja autoestima que desean ganarse el afecto de los demás, siendo excesivamente colaboradores (hasta el punto de la esclavitud) a los que le cuesta decir no a los demás, o sea a las exigencias de las demás personas bien sea amigos, familia o compañeros de trabajo.

Factores causales del intestino delgado y la disfunción del útero-ovarios o próstata que conduce a una Hernia discal lumbar derecha:

  • Estrés: si las situaciones que generen estrés son constantes, supone para el cuerpo un estado de alerta patológico el cual puede desequilibrar potencialmente a la vesícula biliar, al hígado y al estómago, estos órganos acaban de manera bastante rápida afectando el funcionamiento del intestino delgado conduciendo a la aparición de diarreas y estreñimiento, debido a la conexión existente entre el sistema simpático y parasimpático. Con respecto al útero-ovario o próstata estos pueden también verse afectados por el cansancio propio de situaciones de estrés crónico.
  • Alteraciones emocionales: el intestino delgado es altamente sensible a la ansiedad y la preocupación. Ahora bien, los miedos, la falta de autoestimas y las inseguridades relacionadas con la maternidad o con situaciones que afecten su femineidad (maltratos por parte de la pareja en un proceso de divorcio o separación) repercuten en los ovarios-útero. Mientras que la próstata es altamente sensible a emociones como el miedo, la falta de autoestima y la inseguridad relacionada a las situaciones que afecten la masculinidad (por ejemplo, infidelidades por parte de la pareja).
  • Alteraciones nutricionales: el consumo de alimentos como café, gaseosas o cacao resultan nocivos para el hígado lo que afecta indirectamente al intestino delgado, sin embargo, otros alimentos alteran directamente el funcionamiento del intestino, tales como dulces refinados y las harinas.

Al fin y al cabo, todos estos factores influyen negativamente en el sistema musculoesquelético a nivel lumbar, originando tensión en los músculos lumbares, rigidez en la zona dorsal baja, lumbar alta y pelvis, conduciendo a una zona hipermóvil e inestable que acaba dañando al disco intervertebral lumbar, lo que por ende ocasiona la instauración de una hernia discal derecha o izquierda con respuesta refleja ante estas disfunciones viscerales.

Tratamientos desde Fiit Concept – Fisioterapia Integrativa para la hernia discal lumbar

  1. Osteopatía visceral: consiste en la aplicación de maniobras manuales específicas enfocadas en fomentar la movilidad y la motilidad los órganos y vísceras comprometidos.
  2. Manipulación vertebral: debido a que cada órgano repercute en una zona muscular e intervertebral de la columna, es importante intervenir estas áreas. En este caso, se ven afectadas la región dorsal baja, así como la lumbar, al manipular las vértebras irritadas, se incentiva la movilidad adecuada de estos segmentos y se induce un efecto regulador en el sistema nervioso y la médula espinal, lo que disminuye los efectos reflejo negativos provenientes de las disfunciones viscerales correspondientes.
  3. Plantas medicinales: consiste en la elaboración de un plan de tratamiento individualizado mediante la indicación de plantas medicinales o complementos de plantas (jarabes, cápsulas, gotas, infusiones) que fomenten el correcto funcionamiento hepatobiliar y contribuya al correcto funcionamiento de los riñones, los órganos sexuales (útero-ovarios y próstata), el intestino delgado, así como también disminuya los síntomas del colon irritable.
  4. Asesoramiento nutricional: eliminar de la dieta todos los alimentos excitantes que generen irritación o estrés refleja en estos órganos, alimentos como los mencionado anteriormente. Una correcta alimentación junto con un tratamiento de plantas medicinales anteriormente propuesto contribuye a la normalización de las funciones viscerales y que esta no refleje su disfunción en la región lumbar.
  5. Gestión del estrés: programación del horario del sueño y técnicas que permitan la desconexión del trabajo y la integración de ejercicios físicos aeróbicos que fomenta la relajación y le permita gestionar esas situaciones estresantes, para que no afecten al organismo.
  6. Biodescodificación: trata de que el paciente sea consciente de que ciertas situaciones estresantes y de conflicto con otras personas le está generando una hernia discal muy rebelde, con ser consciente de esta relación hace que le afecte menos estas emociones y que las mismas no puedan alterar la biomecánica lumbar.

Ejercicios, automasajes, estiramientos y otros autocuidados para la Hernia discal lumbar

Si bien el ejercicio realizado para esta afección debe estar supervisado y personalizado por fisioterapeutas, existen varios de menos impacto que son compatibles con esta patología. Algunos de ellos te los mostramos en los siguientes vídeos de nuestro portal en YouTube FisioOnline.

Consejos para una mejor recuperación

Primero te dejaremos a continuación unos valiosos consejos por parte de un fisioterapeuta con varios estudios y años de experiencia, te brindará importante información que no sólo te ayudará a tratar adecuadamente esta lesión, sino también a prevenir su aparición:

Tratamiento con ejercicios, automasajes y estiramientos

Cómo ya hemos destacado en la información del pasado artículo, el ejercicio físico en la herramienta terapéutica más eficaz para tratar esta hernia de disco. Es por ello que en el siguiente vídeo te mostramos algunos ejercicios fáciles de realizar, pero altamente efectivos para tratar esta patología, además teniendo en cuenta el positivo efecto que tiene el automasaje en cuanto a la lumbalgia, te enseñamos como realizarlo adecuadamente:

Hernia entre la L4 y L5 o cuarta y quinta vértebras lumbares

No sólo el factor físico y mecánico puede ocasionar esta alteración de la salud del disco, además existes factores viscerales que pueden promoverla. Es por ello que te dejaremos en el vídeo a continuación un tratamiento natural para la herniación L4-L5, que ayudará a recuperar la función visceral alterada:

Hernia entre la L5 y S1 o quinta vértebra lumbar y el sacro

Al igual que la herniación L4-L5, la herniación L5-S1 es muy frecuente, para remediarlas mediante el tratamiento natural te recomendamos ver el siguiente vídeo, en donde obtendrás información acerca de los tratamientos enfocados en las disfunciones visceral que promueven la aparición de esta discopatía:

Pronóstico de la Hernia discal lumbar. ¿Cuánto tarda en curarse?

Muchos discos herniados lumbares pasan desapercibidos. En los casos sintomáticos, el pronóstico es favorable ya que la mayoría del dolor y los síntomas desaparecerán después de algunas semanas con el tratamiento conservador. Sin embargo, incluso después de un tratamiento exitoso, puede reincidir la lesión en el mismo disco intervertebral afectado o entre los cuerpos vertebrales adyacentes. Para reducir el riesgo de que esto ocurra, todos los que hayan sufrido esta patología deben entrenar regularmente sus músculos lumbares y mantener los consejos dados por el fisioterapeuta para evitar reincidencias y mantener la salud en general.

En los casos sintomáticos, el pronóstico es favorable ya que la mayoría del dolor y los síntomas desaparecerán después de algunas semanas con el tratamiento conservador.

Aunque el tratamiento quirúrgico tiene una alta tasa de éxito, la cirugía debe considerarse cuidadosamente en la mayoría de los casos. Ya que hay pacientes que la cirugía no logra proporcionarle la libertad síntomas deseada a largo plazo. Esto debido al hecho de que la intervención no eliminó la causa real del dolor o que creó nuevas causas de dolor (daños nervios o de otros tejidos). Por lo tanto, un disco herniado solo debe operarse si es urgentemente necesario, por ejemplo, porque causa parálisis. Hasta el momento, no hay forma de averiguar de antemano qué pacientes con hernias discales se benefician más de una operación de disco intervertebral.

Publicado: 28/02/2020 / Revisado y modificado: 08/05/2023

Fisiorespuestas de Hernia discal lumbar