Las fracturas son lesiones frecuentes en la población general debido a que tienen múltiples causantes, sin embargo los adultos mayores y los niños son los individuos que suelen presentar con mayor prevalencia este tipo de traumatismos debido a la fragilidad ósea que los caracteriza por la etapa en la que se encuentran. En el caso de la fractura de cadera del anciano, esta resulta ser una lesión frecuente en personas mayores de 65 años, por lo que la prevención se ha convertido en una parte fundamente para disminuir las estadísticas.
¿Qué es la fractura de cadera del anciano?
La fractura de cadera del anciano es un tipo de traumatismo que afecta a las personas mayores de 60 años de edad, debido a una caída o golpe directo en la región de la articulación coxofemoral. A nivel médico, esta lesión se puede clasificar de acuerdo al lugar de la discontinuidad del hueso, por lo que encontramos la que se produce entre la cabeza femoral y los trocánteres, la que se desarrolla en el trocánter mayor y el trocánter menor y la última que afecta a la zona del cuerpo del fémur.
En cuanto a los signos y los síntomas podemos destacar el dolor, la incapacidad funcional, el edema, cambios en la coloración de la piel y hemorragias cuando son heridas abiertas.
“La atención médica de los pacientes con fractura de cadera debe ser inmediata para evitar otras complicaciones de la salud”
Estas fracturas pueden tornarse muy complicadas debido a la edad del paciente, por lo que entre las consecuencias se incluyen debilidad muscular, infecciones, disminución en la amplitud articular, riesgo de embolia pulmonar, artrosis, daño en los nervios de la zona y trombosis venosa profunda.
Referente al tratamiento, este al principio será médico porque en muchos casos se requiere de cirugía, luego posterior a ese tiempo se necesita comenzar con un proceso de rehabilitación que suele ser largo dependiendo de las complicaciones asociadas. Por lo que el individuo será remitido a terapia física y a terapia ocupacional.
Causas de la fractura de cadera
La causa principal de las fracturas de cadera radica en un traumatismo o golpe directo sobre la zona en la que se articula el fémur con el hueso ilíaco, por lo que son muchos los factores que pueden influir para que un adulto mayor tenga una caída.
Factores de riesgo
Como ya sabemos los golpes directos en los huesos son los causantes de las fracturas, sin embargo es importante mencionar cuales son esos factores que aumentan el riesgo de que una persona sufra de estas lesiones óseas. Entre las cuales se encuentran:
- Osteoporosis. La debilidad del tejido óseo es un factor que predispone que una persona tenga mayores traumatismos en los huesos, en comparación con otros que no lo tienen. La osteoporosis suele ser más frecuente en mujeres.
- Debilidad muscular. Los músculos son los que permiten que mantengamos las posiciones, por eso la debilidad de los mismos genera pérdida de balance corporal.
- Ataxia. Este problema neurológico ocasiona un aumento en la base de sustentación y dificultades para caminar, por eso pueden ser factores de riesgo para las caídas de los adultos mayores.
- La falta de ejercicio físico genera debilidad muscular, por lo que aumenta el riesgo de lesiones.
- Problemas articulares como la artrosis.
- Alteraciones en el equilibrio.
- Enfermedad de Parkinson.
- Problemas visuales.
¿Cómo prevenir la fractura de cadera del anciano?
La prevención de las caídas y con esto mismo las fracturas en los ancianos pueden ser disminuidas cuando se trabaja de forma regular no solo el aspecto físico si no también el cognitivo.
“Las fracturas de cadera pueden afectar a cualquier sexo, sin embargo son más predominantes en las mujeres que tienen más de 65 años”
Por lo que entre las recomendaciones y consejos se incluyen los siguientes:
- Mantener a los ancianos realizando ejercicio físico de forma regular, en los cuales se trabajen las capacidades físicas de la persona. Por lo que se recomienda incorporar actividades para trabajar la coordinación, equilibrio, fuerza muscular, flexibilidad y resistencia cardiovascular.
- Realizar actividades recreativas para mantener a las personas mayores de 60 años activos. Por lo que se recomienda trabajar la memoria.
- Establecer rutinas y actividades de la vida diaria.
- Mantener una alimentación balanceada así como también la hidratación constante.
- Preparar la habitación y el resto de la casa sin objetos que puedan comprometer el suelo por donde transita la persona constantemente.
- Establecer y seguir los tratamientos en caso de que los ancianos padezcan de enfermedades como la osteoporosis y la artrosis.
Además de lo mencionado anteriormente, se aconseja que después de cierta edad la persona no viva sola, ya que estos traumatismos pueden llegar a ser muy severos cuando no se atienden a tiempo.
Recomendaciones para evitar caídas
Las caídas son las principales causantes de las fracturas en los adultos mayores, por eso en el siguiente vídeo encontrarás información relacionada con la prevención de las mismas.