El cuerpo está compuesto de una serie de tejidos que se encargan de trabajar en conjunto para lograr las funciones básicas del organismo, por eso cuando hay disfunciones en algún órgano es común encontrar que se manifieste en lugares lejanos, tal como ocurre con los problemas de los órganos abdominales y el dolor de espalda. Por ejemplo, cuando hay una alteración a nivel de las vértebras lumbares, como es la protrusión discal resulta necesario fortalecer la musculatura abdominal para evitar la presencia de otros problemas y también para ayudar en la recuperación funcional.
¿Por qué es importante fortalecer el abdomen en casos de protrusión discal lumbar?
Los músculos del tronco tanto de la parte anterior como de la espalda son los que se encargan de intervenir en la postura corporal y de movilizar las articulaciones de la zona, por lo que a nivel de la biomecánica, algunos tienden a la debilidad mientras otros al acortamiento, lo cual genera mayores probabilidades de lesionarse cuando no se trabajan adecuadamente.
En el caso de los que se localizan en la espalda estos tienen la función de mover la escápula, el hombro, mantener la postura y de estabilizar a las vértebras, resultando entonces afectados ante la presencia de lesiones en la columna vertebral; por el contrario los abdominales se encargan de soportar a la porción superior del tronco y a la movilización de la cavidad torácica y abdominal junto al diafragma, por lo que en general se mantienen débiles.
"Los abdominales son músculos con tono muscular bajo, lo que requiere que sean tonificados de forma activa por la persona para así mejorar la postura y aliviar el dolor de espalda"
Lo descrito anteriormente, quiere decir que ante la presencia de lesiones como la protrusión discal lumbar, es necesario que los abdominales sean fortalecidos ya que ayudan a disminuir el dolor de espalda baja y mejorar la postura, y que por otro lado se requiere también del estiramiento de los músculos posturales, es decir de los que se localizan en la espalda debido a que ayudan a aliviar las tensiones en los tejidos que se sitúan cercano a la lesión.
¿Cómo fortalecer el abdomen con una protrusión discal lumbar?
La protrusión discal lumbar es una patología en la cual el núcleo pulposo se moviliza fuera de su lugar fisiológico, lo que implica que aparezca un abultamiento en la vértebra y que se debiliten los tejidos que se localizan en la columna lumbar. Por tal razón, cuando el paciente desea entrenar debe tener en cuenta todos aquellos movimientos que puedan empeoran el cuadro clínico y que aumenten las probabilidades de que aparezca una hernia discal, la cual es una condición más severa para la persona que lo padece.
Entonces, debido a lo mencionado es que muchas veces surge la duda de los pacientes con respecto a como fortalecer sus abdominales y demás músculos sin lesionar más su espalda y es allí cuando se involucra el fisioterapeuta y el ejercicio terapéutico como parte del tratamiento.
Ahora bien, en fisioterapia se utilizan muchos métodos, técnicas y ejercicios que pueden beneficiar a los pacientes que presentan protrusión discal en la zona lumbar, sin embargo entre los más beneficios podemos mencionar el Pilates, ejercicio con ligas y los hipopresivos abdominales, todos indicados para la recuperación de la lesión y para la tonificación abdominal.
Ejercicios abdominales ¿Cómo los hago cuando tengo problemas en la columna vertebral?
La columna vertebral si bien está compuesta de tejidos óseos que resisten los movimientos de la vida cotidiana, cuando estos son excedidos puede presentar alteraciones como la hernia y la protrusión discal, por lo que disminuye mucho su capacidad para resistir a los ejercicios y a ciertas movilizaciones del tronco. Siendo entonces necesario que al momento de intentar fortalecer músculos como los que se encuentran en la región abdominal se tenga en cuenta la frecuencia, intensidad y posición durante el ejercicio, lo cual podrás aprender al observar el siguiente vídeo:
Ejercicios para tonificar abdomen y tronco con ligas
Las ligas como las theraband son muy empleadas en las sesiones de fisioterapia debido a la versatilidad que ofrecen a la hora de fortalecer los músculos de todo el cuerpo, por eso sirven para entrenar tanto tronco, como piernas y brazos. Por ejemplo, en el caso de los ejercicios abdominales existen gran variedad de posiciones y de movimientos que pueden servir para tonificarlos, de las cuales destacamos los que se muestran en la siguiente imagen:
- Posición sedente en el suelo. Se procede a abrir las piernas en abducción y a colocar la liga en un pie mientras se sostiene con ambas manos. La ejecución de ejercicio consiste en rotar el tronco y la cabeza en dirección a la pierna que no tiene la liga, esto movimiento se logra gracias a la fuerza que se imprime en los oblicuos y en algunos músculos de la espalda.
- Posición de pie con la liga sostenida en la planta de ambos pies y sostenida con las manos. Luego el ejercicio consiste en flexionar las rodillas y elevar ambos brazos con la liga para finalmente inclina el tronco hacia anterior y estirar las rodillas, logrando ejercitar tanto brazos como piernas y espalda.
- Posición decúbito supino con las rodillas flexionadas y la liga amarrada en alguna superficie o sostenida por otra persona. Durante este ejercicio se realiza un abdominal elevando las escápulas y la cabeza del suelo, mientras se estira la liga por encima de la cabeza.
Estos ejercicios descrito si bien pueden ser empleados en personas con hernia discal o con protrusión, siempre será necesario que se mantenga la espalda recta para evitar que el movimiento de flexión de la columna empeore el pronóstico.