Las rutinas de skincare o cuidado de la piel son un hábito cada vez más viralizadas y practicadas tanto en la población joven como adulta, en la cual además, a nivel global se invierten grandes cantidades de dinero en productos y equipos de tecnología.
A pesar de que estos hábitos de cuidado del rostro sin duda pueden traer consigo múltiples beneficios que van más allá de lo estético, cuando se trata de la salud de la piel, es necesario conocer las recomendaciones e indicaciones pautadas por parte de un profesional en el área. Es por ello que en el siguiente artículo recopilamos todo lo que hace falta saber para realizar una rutina ideal para el cuidado de la piel.
Existen métodos tradicionales que pueden realizarse desde el hogar y han demostrado tener múltiples beneficios en la salud del rostro, como lo es la doble limpieza facial, la cual permite alcanzar una limpieza de la piel de manera profunda, otorgándole mejor textura al eliminar impurezas y restos de maquillaje que podrían deteriorarla.
¿Qué es la doble limpieza facial?
La doble limpieza facial es un método originario de la cultura oriental que consiste, como lo indica su nombre, en limpiar el rostro 2 veces, con el fin de eliminar de manera más efectiva las impurezas que puedan estar presentes. Ayuda a desobstruir los poros, retirando las células muertas y, además, prepara la piel para la aplicación de productos o tratamientos cosméticos, permitiendo que estos penetren con mayor facilidad y sean más eficaces.
Principales beneficios de la doble limpieza facial
- Previene la aparición de comedones
- Permite mayor efectividad en la aplicación de productos
- Mejora la apariencia de poros abiertos
- Elimina las células muertas
- Aporta mejor textura a la piel.
Fases de la doble limpieza facial
Las fases de la doble limpieza facial se dividen de la siguiente manera:
- Primera fase: En esta se debe aplicar un limpiador de base oleosa para eliminar el sebo y aceite producido por el rostro, además del maquillaje o posibles cosméticos que puedan quedar en la piel. Esto es debido a que los distintos productos de belleza facial como bloqueador, maquillajes u otros, se disuelven con mayor facilidad en soluciones con una base oleosa.
- Segunda fase: Tiene como objetivo limpiar profundamente la superficie del rostro, retirando sobre ella las células muertas gracias a la aplicación de una solución con base acuosa, como jabones exfoliantes, geles o mousses limpiadores.
¿Cómo hacer una rutina de doble limpieza facial paso a paso?
Para realizar una doble limpieza facial, en la primera fase, se debe aplicar el limpiador de base oleosa sobre la piel, realizando movimientos circulares con la mano, auto masajeando la zona nasal, pómulos y el entrecejo. De esta manera se logra eliminar la grasa del rostro, sudor y restos de cosméticos. Para retirar este producto se deben utilizar toallitas desechables, discos de algodón o algún otro material que sea especial para el rostro, realizando movimientos en forma de toques suaves, sin arrastrar la toalla a través de la piel. No será necesario enjuagar con agua el producto ya que de eso se encargará el siguiente paso de la limpieza.
En la segunda fase se procede a limpiar la cara con el producto de base acuosa, permitiendo retirar restos que hayan quedado del producto oleoso. Para ello se debe aplicar en conjunto agua tibia, auto masajeando de manera circular con los dedos o un cepillo de uso especial para el rostro.
Para finalizar la rutina de doble limpieza facial, principalmente si se está aplicando este método en un tipo de piel grasa o acneica, se procede a aplicar un tónico, el cual permitirá regular el PH.
Productos recomendados según cada tipo de piel
Una de las mejores características de esta rutina de limpieza es que se puede aplicar adaptada a cualquier tipo de piel. Sin embargo, se debe considerar que los productos a escoger sean los adecuados según las características de tu piel. Así pues, es posible adaptar la aplicación de este método a los distintos tipos de pieles de la siguiente manera:
Piel grasa
Primera fase: Limpiar simultáneamente con una mezcla abundante de aceite y jabón.
Segunda fase: Se puede aplicar un limpiador facial en gel o arcilla, preferiblemente en este paso se debe seleccionar un limpiador que contenga en su composición ingredientes como áloe vera, pétalos de rosa, entre otros.
Tercera fase: Para finalizar este proceso, se recomienda aplicar un tónico facial con un PH entre 4.9 - 5.
Piel seca
Primera fase: En el caso de la piel seca, se recomienda hacer uso de bálsamos limpiadores, aceites de girasol o jojoba, lo cual permite estimular la hidratación de la piel.
Segunda fase: Es recomendable utilizar productos que contengan ingredientes anti envejecimiento como la vitamina C, té verde o ácido hialurónico. Posterior al enjuague, aplicar una loción humectante nocturna sobre la piel ligeramente húmeda para ayudar a sellar la humedad.
Tercera fase: Por último, el tónico adecuado para aplicar en el tipo de piel seca debe tener un PH entre 5.2 - 5.5
Piel mixta
Primera fase: Con respecto a la piel mixta, al igual que en el caso de la piel seca, es importante hacer uso de limpiadores a base de aceite que sean ricos en nutrientes y ayudan a hidratar la piel.
Segunda fase: Para mantener el equilibrio de la piel, se debe auto masajear suavemente con un limpiador como el agua micelar u otros limpiadores en espuma que de preferencia contengan ácido hialurónico.
Tercera fase: Como tercer paso, el tónico facial recomendado para este tipo de piel debe contener un PH entre 5.7 - 5.9
¿Cuándo debo hacer la rutina de doble limpieza facial?
Lo ideal es aplicar esta rutina de doble limpieza y cuidado facial dos veces al día para garantizar mejores resultados. Puede ser realizada en la mañana, al momento de empezar el día o en la noche antes de irse a la cama. En caso de qué no sea posible mantener las dos aplicaciones diarias de este método, el mejor momento para incluirla será en la noche, para de esta manera retirar todos los residuos de productos ambientales que se hayan acumulado durante el día.
Productos no recomendados para la doble limpieza facial
Al realizar tu rutina de skincare se debe evitar el uso de ciertos productos como por ejemplo:
- Aceites culinarios como aceite de oliva, coco, entre otros.
- Aceite Jhonsson.
- Productos que contengan sulfato.
- Jabones artesanales o en barra que no identifiquen el PH
- Productos con un PH no acorde al tipo de piel
Ante lo mencionado, es importante resaltar que se evita el uso de aceites minerales o de uso culinario, debido a que su composición trae como consecuencia la obstrucción de los poros y en casos graves originan o empeoran los problemas como el acné.
Sin duda, las necesidades que tiene nuestra piel en cuánto a su cuidado varía dependiendo de la estación del año en la que nos encontremos. Es por esto que a continuación explicaremos algunas de las recomendaciones y precauciones a tener en cuenta en cuanto al cuidado de la piel, así como los mejores productos y tratamientos que puedes realizar durante las diferentes épocas del año.
Consejos para cuidar la piel en verano
Seguro que ya has escuchado hablar acerca de las muchas razones por las qué es necesario proteger la piel durante el verano para prevenir las quemaduras y manchas.
El uso de protector solar es un punto fundamental para el cuidado de la piel durante el verano, protegiendo el rostro de quemaduras y manchas del sol. Para esto, existen algunas recomendaciones que deben tenerse en cuenta para el momento de su aplicación, como que debe ser aplicado sobre la piel limpia, en la zona del rostro, cuello y busto. Tener además presente si es un protector resistente al agua en caso de ir a nadar. Por otra parte, si se trata de un protector orgánico, deberá ser aplicado 30 minutos antes de estar en contacto con el sol. Para finalizar es necesario recordar la importancia de replicarlo cada hora, sobre todo si se está en contacto con el agua.
Debido al aumento del calor, el contacto con el sol, actividades al aire libre, nadar en piscina o en el mar la piel se encuentra propensa a presentar alteraciones en su estado. A continuación se mencionan algunas de las patologías o lesiones a nivel de la piel que se suelen desarrollar de forma más frecuente durante la época del verano:
- Brotes de acné
- Dermatitis seborreica
- Piel seca o deshidratada
- Inflamación de los folículos
- Manchas blancas de despigmentación o marrones
- Quemaduras solares
- Arrugas
- Rosáceas
Algunos de los tratamientos estéticos profesionales que puedes realizar en tu piel durante el verano para favorecer su cuidado son:
- Limpieza facial profunda sin componentes abrasivos.
- Tratamiento con vitaminas inyectadas.
- Dermapen, mascarillas o mesoterapia.
- Radiofrecuencia facial.
- Tratamientos manuales como Maderoterapia lifting o drenaje linfático manual.
Por otra parte, desde el hogar también es posible realizar tratamientos faciales enfocados principalmente en la hidratación del rostro y rutinas de skincare que te permitan mantener la salud de tu rostro, como mascarillas diarias de hidratación, aplicación de cremas hidratantes nocturnas y despigmentantes nocturnos en caso de ser necesario.
Finalmente, también es fundamental tener en cuenta algunas de las precauciones en cuanto al cuidado del rostro así como los tratamientos que no se deben aplicar durante el verano. Entre éstos se mencionan los siguientes:
- No realizar tratamientos abrasivos
- Evitar realizar tratamiento láser en el rostro
- Evitar la depilación con cera días antes de tomar sol
- No lavarse el rostro con agua caliente
- No tomar sol si usar una protección solar apropiada
- No aplicar productos culinarios en el rostro
Consejos para cuidar la piel en invierno
Durante el invierno es frecuente que la piel presente cambios debido a las bajas temperaturas, principalmente, los capilares presentes en el rostro se contraen, provocando una disminución en la llegada de oxígeno y nutrientes, así como un aspecto más pálido y apagado. Además, también se presentaron cambios en cuanto a la secreción de sebo, por lo cual es posible que la barrera de la piel también se vea perjudicada. Es por ello que se recomienda lo siguiente:
- Realizar una correcta hidratación profunda del rostro y en el cuerpo
- Mantener hidratados los labios
- Evitar usar temperaturas extremas en los baños o duchas
- Continuar con el uso de bloqueador solar
Por otra parte, durante el invierno es posible realizar tratamientos faciales y corporales especializados para el cuidado de la piel que estimulen la producción de colágeno, retrasando el proceso de envejecimiento de la piel y de la misma forma, aprovechar esta época para aplicar otros tratamientos estéticos qué no están recomendados durante el verano. Algunos de los principales tratamientos recomendados son:
- Tratamiento láser
- Peeling químico
- Depilación con láser
- Tratamiento para las várices arañas vasculares
- Tratamiento hidro oxigenante
- Radiofrecuencia
- HIFU
- Antienvejecimiento
Errores comunes al cuidar tu piel
Extracción de granos
La extracción de granos es el error principal y uno de los más comunes en cuanto al cuidado de la piel del rostro. En primer lugar, esto se debe a que no todos los granos que se presentan en el rostro deben ser eliminados mediante un procedimiento de extracción, por lo que es recomendable acudir a un centro estético con profesionales del cuidado facial.
Otro de los puntos fundamentales es realizar una técnica correcta para la extracción de granos, para así evitar daños en la piel. Durante esta, no se recomienda utilizar las uñas, herramientas como bolígrafos, ni mucho menos aplicar productos no cosméticos en el rostro como pasta dental o pega blanca.
Utilizar en el rostro productos no cosméticos
- Alcohol a 90 grados de concentración
- Limón
- Plantas
- Mascarillas de yogur
- Mascarillas de carbón
- Pasta de dientes
Realizar exfoliaciones de forma incorrecta
Nuevamente, uno de los principales errores al momento de realizar una exfoliación en el rostro es al momento de elegir el producto. El uso de materiales muy abrasivos e incluso en algunos casos, el uso de materiales no cosméticos como el café, azúcar, sal, perjudican a la epidermis o capa superficial de la piel, afectando la barrera que la recubre.
La clase de producto que se indica para realizar una exfoliación facial varía según cada tipo de piel. Los productos exfoliantes según su método de uso y descripción del producto se clasifican de la siguiente manera:
- Mecánicos
- Químicos
- Enzimáticos
- Peel off
Otra de las equivocaciones frecuentes a la hora de realizar exfoliaciones faciales corresponde a la fuerza de aplicación del producto, la cuál sucede generalmente al usar un exfoliante de tipo mecánico. Además, zonas más sensibles como el contorno de ojos o el borde de la boca no requieren tanta intensidad ni productos tan fuertes al momento de hacer este procedimiento.
Por último, realizar exfoliaciones faciales con demasiada frecuencia también puede generar un efecto contrario al deseado, puesto a que la piel responde a ello generando mayor cantidad de sebo, como forma de una respuesta de protección. Por esto, la recomendación en casos de piel sana es realizar exfoliación facial máximo una vez por semana.
Uso de bronceadores sin protección solar
El bloqueador solar es necesario para proteger la piel de los rayos UV, evitar quemaduras y daños en la dermis. Al tomar el sol para broncearse es recomendable hacer uso de productos qué incluyan un factor de protección solar mayor a 50 FPS.
Uso de jabones en pastilla y artesanales en el rostro
Los jabones artesanales y en pastilla contienen un pH muy elevado a diferencia de la piel del rostro, por lo cual, el uso de este tipo de productos va a provocar una alteración en la barrera que protege la piel, generando un estado de sequedad y cómo consecuencia de esto, produciendo un efecto contrario de mayor producción de sebo y grasa.
Para concluir, es importante destacar que además de la presente rutina de doble limpieza y los consejos y recomendaciones planteados, existen otras técnicas como los automasajes y ejercicios de gimnasia facial que, aplicadas en conjunto con este método, aportarán beneficios notables en la estética del rostro, disminuyendo las líneas de expresión, aportando así una apariencia joven, saludable y luminosa a tu piel.