¿Sientes las piernas pesadas? ¿En verano te duelen las piernas y te cuesta caminar? ¿Te notas las venas a través de la piel especialmente con el calor? Puede ser que tengas varices. Las varices, también denominadas insuficiencias venosas, son dilataciones permanentes e irreversibles de las paredes de las venas. Afectan al sistema venoso superficial y mayoritariamente a los miembros inferiores.
Etiología u origen de las varices
- Primarias o esenciales: son idiopáticas (de origen desconocido) o condicionadas por factores genéticos. Principalmente se dan en mujeres.
- Secundarias: se relacionan con una obstrucción del retorno venoso de un determinado territorio vascular. Se deben a trombos, embarazos, obesidad, estreñimiento crónico, presencia de una masa tumoral en el abdomen…
Muchas veces puede darse el caso de un paciente que padece varices primarias, pero aparece una causa que las agrava convirtiéndolas en secundarias.
La composición de las estructuras de la pared venosa predispone a la aparición de varices. La pared venosa posee tres capas, al igual que la arterial, pero la capa media tiene menor componente de músculo liso y mayor componente elástico, al contrario que las arterias. Por ello, tiene mayor predisposición a deformarse. Además, la circulación venosa no está impulsada por ningún mecanismo y en la mayoría de su recorrido circula en contra de la gravedad. Como consecuencia se crea un círculo vicioso en la zona de remanso ya que se ralentiza el retorno de la región adyacente apareciendo a su vez varices en esta zona.
Manifestaciones clínicas de las varices
Inicialmente se manifiestan por ramificaciones de color violáceo visibles pero no palpables. Aparece sensación de pesadez que se agrava a lo largo del día, especialmente si ha sido un día caluroso o ha estado mucho tiempo de pie. Mejora cuando se camina deprisa o al tumbarse con las piernas en declive.
A medida que avanza la enfermedad, las ramificaciones se hacen más extensas y son palpables. La pesadez es constante, el dolor no mejora, pueden aparecer calambres y sensación de claudicación (no puedo seguir caminando). En fases avanzadas puede aparecer un edema dinámico blando denominado flevedema. Se origina en la región retromaleolar (por detrás de los tobillos) y dorso del pie. Si aumenta la gravedad puede extenderse hasta la rodilla sin sobrepasarla.
Complicaciones
- Desarrollo de insuficiencia venosa crónica: alteración vascular de todo el territorio venoso del miembro afectado.
- Pequeñas hemorragias cutáneas por rotura de la pared vascular.
- Alteraciones tróficas: aparece en los casos de varices asociadas a flevoedema.
- Sudoración
- Ulceración: Es la complicación más importante ya que son un foco de infección. Suelen ser grandes, poco profundas, de bordes irregulares y húmedas que supuran. El proceso de cicatrización es lento, por lo que perduran durante mucho tiempo.
- Alteración en la coloración de la piel: Inicialmente cianótica (azulada, sin color) y en fases avanzadas aparece dermatitis ocre o una coloración moteada marrón. Aparece por la acumulación de glóbulos rojos oxidados que se han extravasado del capilar cuya pared debilitada se ha roto.
- Pérdida de vello
- Flevolinfedema: el flevoedema se mantiene en el tiempo y altera de forma secundaria el sistema linfático.
- Aparición de trombosis por la ralentización del retorno venoso. Los pacientes con varices tienen riesgo de desarrollar trombos, por lo que ante un periodo de inmovilización se requiere un cuidado especial con anticoagulantes, vendajes compresivos, movilización precoz, masajes evacuatorios, presoterapia…
Tratamiento de fisioterapia
Forma parte del tratamiento conservador con fines paliativos. Los objetivos serán:
- Reducir la sintomatología
- Mejorar el retorno venoso
- Evitar las complicaciones