Son muchas las pacientes que llegan a la consulta y me dicen que le han comentado en la revisión con la matrona que tienen el suelo pélvico caído, flojo, hipotónico… Pero nadie les explica más. Si leíste el anterior post sobre qué era el suelo pélvico, querrás saber cómo se deteriora para poder evitarlo. En éste artículo te explicamos todo.
¿Qué es el suelo pélvico?
El suelo pélvico es una zona que encontramos en la pelvis, compuesta por un conjunto de músculos y tejido conjuntivo que, a modo de suelo, cierran la parte inferior de la cavidad pélvica. En la siguiente imagen te mostramos cómo es el suelo pélvico:
El suelo pélvico es más tejido conjuntivo que músculo, quiere decir que si analizamos el tejido en sus componentes, podremos observar que es su mayoría el suelo pélvico está formado por fibras de colágeno, que le dan firmeza a la estructura. Pero existen una serie de factores que pueden provocar el deterioro del suelo pélvico, haciendo que éste pierda su firmeza.
¿Cómo se deteriora el suelo pélvico?
Existen muchas causas o factores que determinan el deterioro del suelo pélvico:
El embarazo
La primera forma de dañar el suelo pélvico es el embarazo. Las formas en las que el embarazo afecta al suelo pélvico son:
- Durante el periodo de gestación el peso del útero y su tamaño aumenta. Los músculos y los tejidos del suelo pélvico no están preparados para contrarrestar el peso, por lo que pierden firmeza.
- Durante el embarazo son segregadas muchas hormonas. Uno de los efectos de la mezcla de tantas hormonas es la del aumento de la elasticidad de los tejidos, razón por la que se ve afectada la firmeza del suelo pélvico.
- Al modificarse el eje de gravedad en la mujer embarazada para poder mantener el equilibrio se aumenta la presión sobre el suelo pélvico, que se ve incapaz de amortiguar ese esfuerzo.
El parto
El parto es otro factor que induce problemas de suelo pélvico. Entre las causas de pérdida de firmeza durante el parto tenemos:
- Los pujos, que provocan un estiramiento del suelo pélvico, agravados por la postura en la que en los hospitales se da a luz normalmente (esta es la causa más frecuente por la que el suelo pélvico se ve afectado).
- Un expulsivo (momento del parto en el que se ha finalizado la dilatación y se asoma la cabeza del bebé) mayor a 15 minutos.
- Instrumentalización de más de 3,700kg.
- Perímetro craneal mayor de 35,5 cm.
- Episiotomías (incisión que se practica para facilitar la expulsión del bebé) y/o desgarros por la salida del bebé.
Mucho de lo que ocurre en el parto puede ser paliado con una buena preparación a través de la fisioterapia obstétrica.
Estreñimiento
Otra cosa que causa grandes problemas de suelo pélvico es el estreñimiento. Una persona que no va al baño de forma “normal” (1 vez al día con una deposición de 500 gr de heces de consistencia semiblanda), debe empujar, y realiza los mismos pujos que cuando uno da a luz. Para que lo veas de manera más simple: las mujeres dan a luz una media de dos veces en su vida, una persona estreñida empuja varias veces por semana, ¿os imagináis el desastre?.
Laherencia genética
Siempre está ahí, pero solo influye en un 2%, de modo que casi nadie hereda un mal suelo pélvico.
La menopausia
Es otro de los factores que debilitan el suelo pélvico, porque como os expliqué en el primer post, el colágeno pierde calidad y capacidad de firmeza (de aguante) a lo largo de los años, pero sobre todo al disminuir los estrógenos (hormona femenina), que es lo que ocurre en la menopausia.
Los deportes de impacto
Tampoco ayudan porque realizan hiperpresión, es decir, el diafragma y las vísceras digestivas van a empujar a las vísceras de la pelvis haciendo que el suelo pélvico se estire. Todos aquellos deportes en los que el abdomen se abombe implican hiperpresión abdominal, así que buenas noticias: ¡nunca más abdominales clásicos! Conclusión: ¡ni botes, ni abdominales!
La cirugía
Las cirugías. tanto abdominales como de las vísceras ginecológicas, hacen que tengamos cicatrices. Estas cicatrices hacen que los tejidos no se muevan en ciertas condiciones. Por ejemplo: un músculo con una “costura” no se contrae igual que un músculo sin “remiendos”. Además, en el caso de la cirugía abdominal, al “romper” los abdominales, dañan el amortiguador por excelencia que junto al suelo pélvicocontienen las vísceras y evitan los movimientos excesivos de ellas.
Factores de menor incidencia en la pérdida de firmeza del suelo pélvico
Hay otros factores que aunque en menor incidencia entre la población afectan al suelo pélvico:
- Vestir prendas ajustadas. Las "braga fajas" o las fajas abdominales, son la mejor manera de desactivar los abdominales y hacerlos perezosos. Si los abdominales se atrofian nuestro suelo pélvico será el único que amortigüe los efectos del día a día, así que si tienes una faja o te deshaces de ella o te la pones en muy contadas ocasiones.
- Obesidad. Bueno, esto sí tiene incidencia y demasiada en la población a nivel mundial. El caso es que cuanto más grasa corporal tengamos, más peso tiene que aguantar el suelo pélvico.
- Tos crónica. La tos es un esfuerzo que repetido en el tiempo hace que el suelo pélvico se deteriore al estirarse por cada tos.
- Tocar instrumentos de viento o cantar, por el uso excesivo del diafragma y el esfuerzo abdominal. Aquí podría incluir a la gente que se pasa el día hablando, por ejemplo profesoras.
¿Estás en riesgo de tener mal tu suelo pélvico? Ponle remedio antes de que se convierta en un problema, chequéate el suelo pélvico.