Si estás pensando en estudiar fisioterapia, ya lo estas estudiando o has terminado la carrera hace el suficientemente poco tiempo como para no saber aún muchas cosas sobre la profesión, te voy a dar mi personal punto de vista sobre las condiciones que tiene que tener un fisioterapeuta para poder ser un “buen fisioterapeuta(1)”
La verdad es que ser bueno en algo, sea lo que sea no es nada fácil y si ese algo tiene que ver con el trato y la ayuda a otras personas, la cosa se complica aún más:
Ser buena persona
Este es seguramente el primer y más importante requisito(2) que debes de tener, ya que asegurará que eres capaz de ser honesto contigo mismo asumiendo tus límites ante los pacientes sin contarles cuentos ni meterles en caminos en base a un deseo de retenerles como pacientes.
La fisioterapia como toda profesión puede realizarse engañando a las personas para sencillamente obtener un beneficio económico y en la medida que evoluciones en la profesión veras que hay no pocos fisioterapeutas que practican ( como sucede en todo) este tipo de fisioterapia “de mentira” que realmente deja nuestra profesión en bastante mal lugar y contra lo que sin embargo casi nadie lucha.
Pero hay otra forma de engañar a los pacientes, un poco menos macabra o malintencionada pero con parecido resultado y es engañarse primero a uno mismo.
El cuerpo es inmenso, de una complejidad que nadie abarca y comprende y asumir eso y todas las limitaciones que en nuestra labor establece esta idea puede ser y es angustioso en los inicios.
Puedes entonces hacer un ejercicio de humildad ante la inmensidad del ser humano y comenzar a buscar y aprender desde ahí o crearte un puñado de ideas, conceptos y principios que lo llenen todo y te proporcionen una cálida pero falsa sensación de seguridad ante lo que haces. Entonces estarás engañándote a ti y a tus pacientes.
Estar dispuesto a estudiar, y formarte constantemente
Serán muchos fines de semana, viajes, estancias y muchísimos gastos mientras tus amigos/as se van a esquiar o salen de fiesta.
Pero es que no es posible que puedas formarte adecuadamente si no estudias y conoces distintas técnicas, orientaciones y puntos de vista que van a ir forjando tu propia visión de la fisioterapia.
Eso si, siempre llega un punto en que el aprendizaje se basa solo en la aplicación de todos estos conocimientos que hacen que los matices y enriquezcas con un contenido que nadie te puede enseñar, tu propia experiencia.
Tener capacidad de empatizar con otras personas y tener interés en ayudarlas
Si no tenemos un interés personal por el otro, si no sentimos y empatizamos con sus dificultades y sufrimientos, será difícil que tengamos un verdadero impulso y deseo por ayudarle, que debe de estar en el fondo de todo acto terapéutico que quiera ser verdaderamente eficaz.
La fisioterapia no es solo un conjunto de técnicas aplicadas en base a unos principios establecidos y que darán en ese sentido unos resultados estables, fiables y repetibles. La fisioterapia tiene toda una tonicidad del gesto del fisio, todo un juego de transferencias y contra transferencias (conceptos psicológicos que todo fisio debiera conocer) tonos de voz, miradas, silencios y escucha que dan a nuestras acciones físicas todo un matiz fundamental a la hora de obtener del paciente y su cuerpo una respuesta u otra.
Cuando uno tiene un verdadera deseo de ayudar a otra persona, le ofrece no solo la aplicación de una técnica sino un marco relacional que posibilita que el restablecimiento del equilibrio y la salud se den.
Tener la capacidad de abandonar la protección de lo establecido
Lo aprendido en la carrera y los limites de lo científicamente evidenciado son una buena y segura base desde la que partir, pero no pueden ser un límite ni una frontera si quieres encontrar herramientas poderosas que a día de hoy no están demostradas pero que te servirán y harán crecer.
La verdadera dificultad en este viaje hacia lo sutil, está en no perderte y no perder el contacto con el suelo, ya que cuanto mas profunda y sutil es una técnica, más fácil es engañarse, nuevamente la honestidad para contigo mismo será una condición indispensable para nadar entre estas dos aguas, lo científicamente evidente y lo sutil.
Conocerte a ti mismo y a tu propio cuerpo
Desde mi punto de vista, toda persona que quiera realizar una verdadera labor de ayuda debe de hacer su propio camino y recorrido personal que le va a dotar del verdadero poso que llene posteriormente cada uno de sus actos.
Y en ese proceso estará tu cuerpo, herramienta fundamental de tu trabajo y que será importante que conozcas para saber utilizarlo con maestría.
Ya ves, no es una camino fácil, pero si un camino precioso...
Referencias Bibliográficas
(1)https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S1356689X16300091?via%3Dihub
(2)https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S2468781218300687?via%3Dihub